
miércoles, 11 de noviembre de 2020
sábado, 6 de junio de 2020
La verdad que nos hace libres
La verdad que nos hace libres
Juan 8.25-32
Dios desea lo mejor para cada uno de sus hijos, pero a veces quedamos atrapados por hábitos, conceptos y sentimientos negativos que interfieren con sus planes para nosotros.
Pero el
Señor Jesús nos ofrece una salida. Si continuamos en su Palabra, conoceremos la
verdad que nos hace libre de todo lo que nos esté manteniendo cautivos.
“Continuar” en la Palabra significa leerla regularmente y aplicarla a nuestra vida. Entonces sabremos lo que Dios dice, y seremos capaces de reconocer las artimañas que amenazan con atraparnos. Además de esto, entenderemos los beneficios que acompañan a nuestra salvación y que nos permiten mantenernos firmes en la verdad para no ser extraviados.
Estos beneficios incluyen...
• Nuestra posición: Por la fe en Cristo, hemos
comenzado una relación personal con Dios. Ahora, como sus hijos, tenemos libre
acceso a su trono, junto con la seguridad de que Él escucha nuestras oraciones.
• Nuestra provisión: Dios nos dio la Biblia para
guiarnos y alentarnos.
• Nuestras promesas: Al confiar en las promesas
que Él nos ha dado, seremos participantes de la naturaleza de Dios, y
escaparemos de la influencia corruptora del mundo (2 P 1.4).
• Nuestra protección: Al caminar con Cristo, Él
nos fortalece y nos protege para que no caigamos en las trampas del maligno (2 Ts 3.3).
El
primer paso para vivir en libertad es reconocer cualquier pecado que esté
dominando su vida. Luego, apóyese en la verdad de la Biblia y reclame las
promesas y la provisión de Dios por fe.
sábado, 7 de marzo de 2015
Devocional
Lectura 7 de Marzo - "Jehová liberta a los cautivos." Salmo 146: 7.
Él lo ha hecho. Recuerden a José, a Israel en Egipto, a Manasés, a Jeremías, a Pedro y a muchos otros. Él todavía puede hacerlo. Él rompe las barras de bronce con una palabra, y desata los grilletes de hierro con una mirada. Él lo está haciendo. En miles de lugares, aquellos que están atribulados están saliendo a la luz y tienen un respiro. Jesús todavía proclama la salida de la prisión para quienes están detenidos. En este momento las puertas se están abriendo de par en par y los grilletes están cayendo al suelo. Él se deleitará en liberarte, querido amigo, si en este momento gimes por causa de aflicción, la duda o el miedo. Será un gozo para Jesús darte libertad. Le dará un gran placer soltarte, como será un placer para ti ser soltado. No, tú no tienes que cortar la atadura de hierro: el propio Señor lo hará. Sólo confía en Él, y Él será tu Emancipador. Cree en Él a pesar de las paredes de piedra, o las esposas de hierro. Satanás no puede retenerte, el pecado no puede encadenarte, y ni siquiera la desesperación puede sujetarte, si crees ahora en el Señor Jesús, y en la gratuidad de Su gracia, y en la plenitud de Su poder para salvar. Desafía al enemigo, y deja que la palabra que está ahora delante de ti sea tu cántico de liberación: "Jehová liberta a los cautivos."
viernes, 9 de diciembre de 2011
viernes, 6 de mayo de 2011
EL PRECIO COMPLETO

"Porque habéis sido comprados por precio. I Corintios 6,20
Un día Jesús le preguntó al diablo qué estaba haciendo con la gente en el mundo. El diablo le contestó:
-Me estoy divirtiendo muchísimo, enseñándoles a hacer bombas y a matar, a odiarse y tomar drogas, a abusar de la infancia, y a hacer todas las cosas que están prohibidas.
Jesús le preguntó - ¿Qué harás luego con ellos?
-Después voy a acabar con todos ellos - volvió a responder el diablo.
Jesús volvió a preguntar - ¿Cuánto quieres por ellos?
El diablo dijo - ¿Por qué querrías estas personas? Son malas, traicioneras, falsas, mentirosas, codiciosas. Ellas nunca te amarán de verdad, blasfemarán de ti, y te escupirán en el rostro.
-¿Cuánto quieres por ellas? - Volvió a preguntar Jesús. -Está bien - contestó el diablo - quiero todas tus lágrimas y toda tu sangre. -Trato hecho.
Y Jesús pagó el precio completo por nuestra liberación, para que el diablo nunca más tenga derecho sobre nuestra vida y podamos librarnos de él y de sus perversiones. Ahora tienes la posibilidad de hacerlo, aprovecha esta oportunidad que Jesús te está ofreciendo a partir de su sacrificio en la cruz del Calvario, entrégale tu corazón y hazlo Señor de tu vida..